Desde el colectivo de Cazorla de la Federación de Jóvenes Comunistas de España nos solidarizamos con los compañeros de la Asamblea de Estudiantes de Cazorla que han resultado sancionados de manera injusta y represiva, acusados de convocar una manifestación estudiantil, un argumento pueril y antidemocrático ya que la manifestación fue convocada por los más de 200 estudiantes que estuvieron presentes en la asamblea abierta del día 13 de Octubre.

Desde aquí comunicamos nuestra solidaridad, y nuestro ofrecimiento a participar y colaborar activamente en todos los actos o campañas que se desarrollen a raíz de estos acontecimientos, más propios de la época franquista que de esto que nos venden como democrático, pero no nos sorprende, la represión en este estado está a la orden del día, deteniendo y encarcelando a jóvenes con compromiso, como el compañero Alfón, que sigue en la carcel tras ser detenido en la Huelga General, sin más delito que llevar un megáfono en sus manos, víctima de un burdo montaje policial, recordándonos que en este país, solo hay justicia para la clase dominante, los poseedores de una riqueza que nos roban diariamente a la clase trabajadora.
El capitalismo se hace insostenible, y para intentar evitar el desplome de un sistema caduco y genocida, sacan a la calle a sus perros de presa, a ejercer la represión y la coacción, mientras la extrema-derecha, patrocinada por las instituciones, campa a sus anchas por las calles, agrediendo inmigrantes, jóvenes con compromiso o cualquier colectivo que suponga un problema para el mantenimiento de este pútrido sistema.